domingo, 31 de mayo de 2015

AÑADIDO A "LA CHICA DE LOS OJOS GRISES"

Hola a todos.
Aquí os traigo un nuevo añadido a mi fanfic La chica de los ojos grises. 
Esta vez, está centrado en la figura de Maude y en los celos y el dolor que experimenta después de haber sido rechazada por Edmund.
¡Veamos qué le ocurre!

                                   El comportamiento de Maude fue objeto de preocupación por parte tanto de sus padres como de su hermana menor. Maude no podía quitarse de la cabeza el hecho de que Edmund se había enamorado de una de las mejores amigas de Samantha. A veces, sentía el deseo de ponerse a gritar como una loca.
-¿Cuándo vas a salir?-le preguntó su madre golpeando con suavidad la madera de la puerta.
                              No quería salir nunca más de su habitación. Ella no era una mujer celosa. Era joven y bella. Se sabía deseable. Jamás había sido celosa. Jamás...
                              ¿Cómo una mujer bella, joven y deseable podía tener celos? ¡Celos!
                              ¡Celos de una niñata como Stella! ¡Era impensable!
                              La tarde en la que se declaró a Edmund, trató de besarle en los labios, pero él la rechazó.
-Lo siento-le había dicho.
                              ¿En qué momento se había convertido en una mujer celosa?, se preguntó Maude. Nunca antes le había pasado. Los celos eran algo ajena. Los hombres se peleaban por estar con ella. Por conquistarla. Y ella los rechazaba a todos. Ninguno de sus pretendientes era digno de ella. Hasta que conoció a Edmund. Era un joven de apariencia seria.
                           Pero Maude llegó a conocerle bien. Su apariencia seria era sólo una fachada.
                           Había pasión en él. Lo advirtió en su mirada. Pero nunca la había mirado así.
                           Nunca antes había estado tan enamorada.
-¿Qué te pasa?-le preguntó Samantha golpeando la madera de la puerta.
-No me pasa nada-respondió Maude con rabia.
-Llevas todo el día encerrada. ¡Sal de una vez!
-¡Quiero estar sola!
-¿Te encuentras bien, Maude?
-¡Déjame en paz, Sammy!



                           Samantha estaba preocupada por su hermana mayor.
                           De las dos, Maude había sido siempre la más serena. La que se tomaba las cosas con calma. La que lo analizaba todo de manera fría.
                           De pronto, no la reconocía. Parecía estar fuera de sí. No puede ser esta mujer mi hermana, pensó Samantha con tristeza.

sábado, 30 de mayo de 2015

AÑADIDO A "LA CHICA DE LOS OJOS GRISES"

Hola a todos.
No podía dejar pasar mis añadidos a mi fanfic La chica de los ojos grises. 
Tengo algunas ideas en mente con esta historia que se irán viendo poco a poco. Ya os iré comentando.
De momento, aquí os dejo con una escena que no llegué a incluir en el relato original y que da una idea de lo que podría haber pasado en un posible triángulo amoroso entre Maude, Edmund y Stella.

                                 Edmund debió de haber sospechado algo por la forma en la que Maude le dirigía la palabra. Debió de haber intuido que algo raro le ocurría cuando ella le miraba de aquella forma que le hacía sentirse incómodo.
-Pienso que podría haber una oportunidad para nosotros-le pidió la joven.
-Yo creo que te estás equivocando-afirmó Edmund.
                              Maude sintió cómo se le formaba un nudo en la garganta. Había llegado a creer que Edmund podía llegar a amarla. Después de todo, no se parecía en nada a Stella.
-¿Por qué me estás pidiendo esto?-le preguntó el joven con timidez.
-Porque quiero que estemos juntos para siempre-respondió Maude con pasión.
                             No había entendido a Samantha. No supo comprenderla cuando murió Gabriel.
                             Su hermana hacía bien. No estaba enamorada de mister Halliwell. Entonces, no tenía porqué casarse con él. Maude quería ayudar a Samantha.
                             Podía ayudarla a huir de la isla. No tendría que casarse con aquel hombre.
                             Pero, antes, quería saber lo que podía ocurrir entre Edmund y ella.
-Odio pensar que puedas estar enamorado de Stella-añadió Maude-Has llegado a conocerme bien, Edmund. Yo puedo darte todo lo que Stella no puede darte. Tú necesitas a tu lado a una mujer apasionada. No quiero que Stella se interponga entre nosotros.
-Amo a Stella-le recordó Edmund a Maude-Lo siento mucho.
-¡Estás mintiendo! Stella es una buena chica. Pero no te conviene.
                           Se encontraban sentados a la orilla del río.
-Te ruego que me perdones si te he dado falsas esperanzas-dijo Edmund con pesar-Nunca he querido herirte. Has llegado a ser una buena amiga.
-¡No quiero ser tu amiga!-sollozó Maude, rompiendo a llorar-Yo quiero ser tu alma gemela.
-Perdóname, Maude. He encontrado a mi alma gemela. Stella es la mujer con la que quiero pasar el resto de mi vida. Te ruego que lo entiendas y que no me guardes rencor. Por favor.
                         Envolvió a Maude en un estrecho abrazo.
                         La besó en la frente y se sintió impotente por no ser capaz de consolarla.

 

viernes, 15 de mayo de 2015

UNA FRASE DE ADOLFO BIOY CASARES

Hola a todos.
Hoy, me gustaría compartir con vosotros esta frase de Adolfo Bioy Casares con la que me siento muy identificada porque yo tampoco me quiero morir. Me asusta la idea de ser pasto de los gusanos algún día.
Adolfo Bioy Casares era un escritor y periodista argentino que cultivó principalmente el género fantástico, de ciencia ficción y el policíaco y sobre el que el gran poeta Jorge Luis Borges ejerció una gran influencia debido a la amistad que les unió.
Ésta es la frase:

"No me gusta nada la idea de morir. Si pudiera vivir quinientos años aceptaría y pediría: ¿No puede darme unos más?"

 Adolfo Bioy Casares.

jueves, 14 de mayo de 2015

UNA FRASE DE JORGE BUCAY

Hola a todos.
El día de hoy lo dedico a Jorge Bucay, un conocido escritor y psicodramaturgo argentino.
El psicodrama es una rama de la terapia psiquiátrica que se lleva a cabo en grupo y que consiste en que la persona debe sacar fuera todo lo que lleva dentro. Se llama así porque se utilizan algunas técnicas teatrales para que la persona saque afuera lo que la está atormentando.
Jorge Bucay utiliza sus cuentos para explicarnos una historia que podría servirnos como ayuda cuando tengamos algún problema.
Uno de sus libros más conocidos es Cartas para Claudia, del que he extraído esta frase:

Tus recuerdos son aquí y ahora, no allí y entonces. 

Nosotros estamos recordando algo que ya hemos vivido. Pero el hecho de que lo recordemos no significa que debamos vivir anclados a ese recuerdo. Sobre todo, cuando es un recuerdo doloroso.
Es como una manera de animarnos a que vivamos el presente.

 Portada de Cartas para Claudia, de Jorge Bucay.