martes, 29 de septiembre de 2015

ESCENA ELIMINADA DE UNA DE MIS NOVELAS

Hola a todos.
Estoy corrigiendo una novela corta de época y con mucho romanticismo que terminé hace unas semanas.
De momento, no sé qué hacer con ella. Sólo sé que le he tenido que cambiar el final. Me he cansado de escribir historias de amor con final trágico y quiero hacer algo distinto.
Quiero que tengan un final feliz porque la vida real es demasiado triste como para que, encima, nos deprimamos aún más leyendo.
En su origen, Rachel, la protagonista, iba a morir. Pero he cambiado eso.
Aquí os dejo el fragmento eliminado:

                             Nada se pudo hacer por ella. Un año después, Rachel fallecía. Fallecía ante la desesperación de sus padres.
            Ben abandonó la mansión solariega de los vizcondes. Su madre había sido despedida después de su huida.
            El mismo día en el que enterró a Rachel, Ben supo que su madre vivía en el pueblo.
            Trabajaba en la posada sirviendo mesas.
            Fue cuando entró en la posada que Ben dio rienda suelta a su dolor.
            Había tratado de ser un buen marido para Rachel. Se había esforzado en hacerla feliz. Y lo único que le había traído había sido tristeza. Thelma trató de consolar a su hijo, destrozada al verle en aquel estado.
__Nos iremos de aquí__le aseguró__Empezaremos una nueva vida lejos de Castle Comb.



domingo, 20 de septiembre de 2015

EMMI Y LEO

Hola a todos.
Aquí os traigo un fragmento de la aclamada novela de Daniel Glattuer Contra el viento del norte. 
Es la bonita y curiosa historia de amor que protagonizan Emmi y Leo, dos personajes que se conocen a través de Internet. Lo que vemos aquí son sus conversaciones vía chat y los correos electrónicos que se mandan.
Los dos se hacen una idea de cómo pueden ser el otro, pero tienen miedo de conocerse en persona por miedo a destruir lo que es, para ellos, una relación perfecta. Aunque no se conozcan en persona, se sienten muy unidos.

Durante meses estuve más cerca de ti que de ninguna otra persona, Emmi. Estaba (y estoy) muy feliz de que todas nuestras tentativas de encontrarnos «físicamente» hayan fracasado. Me da igual qué aspecto tengas, mientras yo pueda verte tal como quiero. Estoy agradecido de no tener que descubrir que en realidad eres distinta de «mi Emmi, la heroína de mi novela de correo electrónico». Allí eres perfecta, la más bella del mundo, ninguna puede compararse contigo.

martes, 15 de septiembre de 2015

LA GATA Y LOS RATONES

Hola a todos.
Uno de los más célebres fabulistas fue el escritor griego Esopo.
En las fábulas, aparecen animales actuando y dialogando como si fueran personas sólo para darnos un consejo al final.
Aquí os dejo con una de las fábulas más interesantes de Esopo.

                                En cierta casa abandonada se dio cita la colonia ratonil y, encontrándola cómoda, establecieron en ella una especie de cuartel.
                               Los visitantes, ebrios de felicidad y de comida, echaron de menos la presencia de Micifuz, una gata, como se dice, muy gata, que, al percatarse de sus nuevos huéspedes, los fue engullendo uno por uno.
                              Los pocos ratones que se salvaron, observando a gata tan carnicera, se ocultaron en sus madrigueras, privando a su enemigo de caza tan deseada. Micifuz, sin darse por vecnida, ideó, a su manera, la forma de atraparlos.
                                Subió a un madero elevado y, colgándose de él, se hizo la muerta; entonces uno de los ratones, al verla en postura tan ridícula, le dijo:
-¡Oiga, amiga y señora nuestra, aunque fuera usted un saco no me acercaría!

                     Quien ha sufrido un revés, 
no lo sufra por segunda vez. 

lunes, 14 de septiembre de 2015

LA CHICA DE LOS OJOS GRISES

Hola a todos.
Me quedan dos añadidos, además de éste, que subir a este blog de mi "fanfic" La chica de los ojos grises. 
De momento, voy a subir este añadido. No tengo ni idea de cuándo subiré los otros dos.
Quiero descansar un poco de la historia de Edmund y de Stella y centrarme en otras historias. Le he cogido muchísimo cariño a los personajes, especialmente a Stella, y me está costando trabajo separarme de ellos.
De momento, aquí os dejo con el añadido de hoy.

                                    El tiempo pasaba demasiado deprisa para Edmund. ¿Cuánto tiempo había pasado desde que Stella apareció en su vida? En realidad, el tiempo se detuvo cuando sus ojos se posaron en ella por primera vez. La ayudaba a plantar nenúfares en el jardín. Le gustaba dar paseos con ella por la orilla del río Adyar.
                                  Su socio, Arthur Ransome, le decía que estaba distinto. Le veía más feliz.
                                 Edmund se sentía con mucha energía. Varias veces a la semana, recibía a Arthur en su despacho. Los negocios iban bien. La Templewood & Ransome Company estaba en pleno crecimiento. Los socios querían invertir en la empresa. Las importaciones iban en aumento.
                                Edmund escuchaba con atención todo lo que Arthur le contaba. Revisaba el Libro de Cuentas. Todo estaba en su sitio.
-Deberías de ir pensando en mudarte a Calcuta-le propuso Arthur en una de aquellas visitas.
                               Edmund le fulminó con la mirada.
                               La idea de irse a vivir a Calcuta jamás había pasado por su mente. Había terminado saturado del bullicio de la ciudad. Era feliz viviendo en aquel trocito del Paraíso que era la isla de Quibble. Además, allí había conocido a Stella.
                                Su esposa no querría abandonar Quibble. Y él no sabría vivir sin aquella criatura de los ojos de color gris.
                                Amaba a Stella más que a su propia vida. Cuando su mirada se cruzó con la mirada de color gris de la joven, supo que había nacido para ser su esclavo.
-¡No pienso abandonar este lugar!-replicó con furia.
                               Los criados le oyeron gritar.
-No puedes dirigir una compañía desde aquí-trató de convencerle Arthur.
-Creo que he podido hacerlo-le recordó Edmund-Los negocios van viento en popa. ¿No es así?
-Así es.
-Entonces, no hay motivo alguno para que abandone Quibble. ¿Cierto?
-Totalmente cierto...
-No me gusta vivir en Calcuta. No me llevo nada bien con nadie de la colonia inglesa. Son todos unos pomposos insoportables. Vive poca gente aquí. Hindúes...E ingleses...Y tratamos de llevarnos bien. Nadie es superior ni inferior a nadie, Arthur.
-Sí...Tienes razón.
                            Arthur se había dado cuenta de que los criados que tenían Edmund y Stella eran todos ingleses. No habían querido contratar a un criado nativo.
                            Stella se negó a tener un hindú a su servicio. Tenía la sensación de que era poco menos que esclavizarle. Había oído historias terribles de la boca de Maude. Ella había estado en Calcuta, intentando buscar un marido sin conseguirlo.
                           Los ingleses trataban muy mal a los hindúes que estaban a su servicio. Les pegaban palizas por cualquier tontería.
-No quiero hacerle daño a nadie-afirmó Stella cuando Edmund y ella empezaron a buscar miembros para su servidumbre-Tengamos pocos criados. Que sean ingleses. Que no tengan que sentir que les estamos esclavizando. No se puede ser el dueño de una persona.
                           Arthur pensó que Stella tenía unas ideas muy raras. Lo cierto era que hacía una buena pareja con Edmund. También éste tenía unas ideas muy raras.
                            Stella entró sin llamar en el despacho de su marido. Aquel gesto le pareció excesivo a Arthur. Sin embargo, Edmund sonrió encantado cuando la joven entró.
                            Ver a Stella le alegraba el día. Fuera, estaba lloviendo con fuerza. Se estaban acercando los primeros monzones.
-Debería de irme-dijo Arthur, poniéndose de pie.
                             Vio a Stella acercarse a Edmund para besarle con intensidad en los labios.
                              Por educación, Arthur besó a Stella en la mano a modo de despedida.
                              No le costaba trabajo imaginar la clase de besos que ambos se daban en la cama.
                              Tenía que reconocer que la esposa de su amigo era una mujer dotada de una inusual belleza. Sobre todo, aquellos hermosos ojos de color gris estaban hechos para perderse en ellos.
                              Pero era la esposa de Edmund y los dos estaban muy enamorados. Arthur deseó para sí un matrimonio como el que tenía su amigo y socio.
                               Ya va siendo hora de que me case, pensó cuando salió al jardín. Hay unas cuantas jóvenes que están interesadas en mí.
                                Apresuró el paso. Se hospedaba en la posada de la isla.
-Me casaré-decidió Arthur.
                                Estaba lloviendo con mucha fuerza. Y se estaba calando.


                         

domingo, 13 de septiembre de 2015

UN PADRE DEFIENDE A SU HIJO

Hola a todos.
Seguro que os acordaréis de esta gran escena de la legendaria serie Los Simpsons. 
Pertenece al episodio Marea Simpson en el que, por diversas circunstancias, Homer se alista en la Marina y acaba acusado de robar un submarino estadounidense y de desertar para unirse a los rusos.
En esta escena, Abe Simpson, el padre de Homer, defiende a su hijo de un modo muy peculiar.
¡Qué grande el abuelo Simpson!


sábado, 12 de septiembre de 2015

DILBERT EN ESTE BLOG

Hola a todos.
El día de hoy me gustaría dedicarlo a un personaje sacado de la mente del dibujante Scott Adams. Se trata de Dilbert.
Este personaje apareció por primera vez en un periódico en el año 1989. Nos presente a Dilbert, un ingeniero que trabaja en una oficina. Vive con Dogbert, su perro mascota (que puede recordar en su carácter canallesco al grandísimo Brian Griffin) y Ratbert, una rata de laboratorio que vive con ellos.
Su día a día transcurre entre su cubículo en la oficina y su casa. Vemos cómo se relaciona con Alice (una oficinista que aborrece su trabajo y tiene un genio muy violento), Wally, un vago que se aprovecha de los demás, su inútil jefe, Asok (un chico hindú muy idealista) o Catbert, un despiadado gato que es el Jefe de Recursos Humanos.
De manera sarcástica y corrosiva se hace una visión del trabajo diario en una empresa poniendo de relieve todo aquello que nos desagrada.
El éxito de la tira ha sido tal que han llegado a publicarse varios libros de ella. El canal Fox estrenó una serie de animación sobre este gran personaje que se emitió en Fox España en el año 1999. ¡Y confieso que adoraba esa serie!
Y me declaro fan de Ratbert, que se autodenomina como la monada de la casa. 
Aquí os dejo con una frase extraída de la tira:

"Para la empresa su mobiliario es más importante que usted".




Dilbert y Dogbert, el perro más corrosivo, con permiso de Brian Griffin.

viernes, 11 de septiembre de 2015

GIDGET GEIN

Hola a todos.
La entrada que hago en este blog es, cuanto menos, sorprendente.
Nunca he negado que soy una gran admiradora de Marilyn Manson.
Me gusta su voz ronca. Me gusta su estética tan llamativa. Y soy de las que de verdad cree que se cortaba (ahora, ya no lo hace) en sus conciertos. Tiene cicatrices en su cuerpo que así lo demuestran.
No vengo a hablaros hoy de Marilyn Manson, sino del que fue su bajista durante la primera etapa de la banda, desde 1989 hasta 1994.
Se trata de Gidget Gein.



Gidget Gein nació Brad Stewart tal día como hoy, 11 de Septiembre. Pero nació en el año 1969. De haber vivido, hoy sería su cuarenta y seis cumpleaños.
Sin embargo, parece que los grandes talentos están condenados a una vida demasiado breve.
Nadie tiene la menor duda de que poseía un gran talento para tocar el bajo. Tenía una personalidad única. Era serio y algo tímido, pero también era divertido y agradable. Captó la atención de Marilyn Manson y se unió al grupo de éste.
Tras tocar en diversos locales, la suerte sonrió al grupo. Trent Renzor, líder del grupo Nine Inch Nails, se fijó en la banda. Los reclutó para su sello discográfico, Nothing Records. 
Sin embargo, la heroína fue la mayor perdición de Gidget. Siempre estaba diciendo que se iba a desintoxicar. Nadie tiene la menor duda de que sus intenciones eran las mejores. Quizás, le faltó ayuda. Quizás, le faltó a a él mismo coraje. Y eso es lo que más rabia me da.
Poseía un gran talento. Pero la heroína tomó el control de su vida. Lo fue alejando cada vez más de su gran pasión, la música. Lo alejó de los miembros de la banda. A finales de 1993, fue ingresado de urgencia en un hospital tras sufrir una sobredosis de heroína.
Mientras estaba recuperándose, sus propios compañeros (lo cual no les termino de perdonar) aprovecharon para echarle del grupo. Fue una puñalada trapera en toda regla.
En 1999, Gidget llegó a Nueva York, donde formó una nueva banda que sólo sacó a la venta un único disco. La banda se llamaba Gidget Gein and the Dali Gaggers. 
No terminaba de superar su adicción a la heroína. Y no se dio así mismo la oportunidad de resurgir de sus cenizas. Volvió a ser ingresado tras sufrir una nueva sobredosis de heroína.
Decidió regresar a Florida, el Estado donde nació. Realizó toda clase de trabajos. Trató de encontrar fuerza en su corazón para abandonar aquel terrible vicio que iba a llevarle a un punto sin retorno. Se volcó en el diseño. La pintura se convirtió en su pasión. Diseñaba ropa. Realizaba esculturas. Organizó numerosos desfiles y también muchas exposiciones de arte. Le encantaba. Se hacía llamar Gollywood.
En el año 2002, dejó a un lado sus rencillas con Marilyn Manson. Participó con él en el videoclip de su tema (s) AINT, del álbum The Golden Age of Grotesque. 
Llegó a aparecer en varias películas. Parecía que había dejado atrás su adicción.
Sin embargo, un fatídico 8 de octubre del 2008, Gidget nos dejaba para siempre, víctima de una sobredosis de heroína. Dos veces había sobrevivido a la misma, pero no pudo hacerlo una tercera. Encontraron su cuerpo al día siguiente en su casa de la ciudad californiana de Burbank.
Todos decían que estaba limpio de drogas. Que tenía muchos proyectos en mente, como una nueva colaboración con Marilyn Manson y un nuevo álbum. ¿Qué ocurrió?
Eso nadie lo sabe.
Gidget ya no está, pero nos queda su música. Su talento...
He aquí mi pequeño homenaje.
Sigo enfadada con él porque nos dejó muy pronto. Porque no supo sobreponerse a su enfermedad. Era un drogadicto. Estaba enfermo. Era un esclavo de la heroína. No era una mala persona. Todos los que le han tratado hablan maravillas de él.



Casi siete años después de su muerte, no se le olvida. Se le recuerda con cariño.
He aquí mi homenaje a este buen músico. Alguien que nos dejó antes de tiempo. Y al que se le recordará siempre.

jueves, 10 de septiembre de 2015

HELLO KITTY

Hola a todos.
No voy a perder la costumbre de subir a este blog todo aquello que nos recordaba a una época que nos queda un poco lejana en el tiempo: la niñez.
Esta entrada sirve para recordar a un mítico personaje que no pasa de moda. Se trata de la gatita Kitty.
Fue creada en el año 1974 por la diseñadora japonesa Yuku Shimizu. Desde que lanzó su primer producto con la imagen impresa de esta graciosa gatita, no ha parado de sacar a la venta productos con la cara de Kitty.
Ha sido tal el éxito de ventas que ha tenido Kitty que ha protagonizado varias series de anime a lo largo de los últimos tiempos.
También ha protagonizado diversos videojuegos y películas.
A día de hoy, Kitty sigue siendo la gatita icono (con permiso de Doraemon) de Japón. Y nos sigue encandilando.
Aquí os dejo con una foto que he encontrado en Internet de ella.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

AÑADIDO A "LA CHICA DE LOS OJOS GRISES"

Hola a todos.
Sé que he dicho que éste iba a ser mi último añadido a este "fanfic" ¡sólo cuatro añadidos más y lo dejo!
Todos están relacionados con la pareja que forman Stella y Edmund, a los que, reconozco, les he cogido mucho cariño.
¿Queréis saber más de su vida en común?
¡Vamos a ello!

                                       Era frecuente ver a Edmund y a Stella pasear cogidos de la mano. El embarazo de la joven ya empezaba a notársele. Una criada que sabía de costura se encargó de ensanchar la cintura de todos los vestidos que Stella poseía.
                                    Maude estaba escandalizada. Sabía que, cuando una mujer se quedaba embarazada, se encerraba en su casa. No podía salir a pasear en su estado. Todo el mundo vería cómo su vientre iba creciendo cada día que pasaba. Sin embargo, eso no parecía preocuparle a Stella. Quería enseñarle a todos los vecinos de Quibble que estaba embarazada. Que iba a darle un hijo a Edmund. Se sentaban a la orilla del río Adyar.
                                   Trazaban planes de futuro. Pensaban en el pequeño Joshua.
                                   Estaban convencidos. Tendrían un hijo. Y le llamarían así.
                                   Joshua...
                                  Stella visitaba con frecuencia a Samantha. Tuvo la ocasión de conocer al prometido de ésta, a mister Halliwell. Le pareció un hombre sumamente amable. Con Gabriel, Stella tenía la sensación de que su amabilidad era fingida.
                                   Sin embargo, mister Halliwell no fingía nada. Su cariño por Samantha era imposible de disimular.
                                  Era verdad que acababa de conocerla en persona. Sin embargo, tenía la sensación de que la conocía desde siempre. Samantha tuvo que reconocer, con pesar, que le agradaba mister Halliwell. No se parecía en nada a su adorado Gabriel.
-Se interesa por mí-le contó a Stella una vez que fue a verla-Le interesa todo lo que me pasa.
-¿Acaso te parece malo que tu futuro marido se preocupe por ti?-se extrañó su amiga-¿Que te escuche cuando quieras contarle algo?
-Con Gabriel...Él nunca me escuchaba.
                              A Samantha le dolía reconocer que su relación con Gabriel no era todo lo idílica que quería recordar. Le asustaba la idea de sentirse atraída por su prometido. De llegar a olvidar a Gabriel.
                              Luchaba por aferrarse al recuerdo de su prometido. Pero mister Halliwell se portaba muy bien con ella. La hacía sentirse querida.
                            Samantha quería pensar que su matrimonio podía ser igual que el matrimonio de Stella, a la que no le importaba besar a Edmund en público.
                             Ella quería algo así.



-Te estás enamorando de mister Halliwell-comentó Maude.
                              Estaban en la habitación de Samantha, contemplando el vestido de novia de color blanco que estaba extendido sobre la cama.
                              La joven miró sobresaltada a su hermana mayor.
-Es verdad que siento algo por él-reconoció.
-Puede que se trate de amor-sonrió Maude.
-Puede que sea amor.

martes, 8 de septiembre de 2015

AÑADIDO A "LA CHICA DE LOS OJOS GRISES"

Hola a todos.
Éste es el penúltimo añadido que me queda a mi "fanfic" La chica de los ojos grises. 
¡De verdad que no me quedan más añadidos por hacer! ¡Os lo prometo!
De momento, os dejamos con este pequeño fragmento que guarda relación con Samantha.
¡Veamos qué le ocurre!

                                      Mister Halliwell estaba cada vez más cerca.
                                      Samantha se ponía enferma cada vez que pensaba en lo inminente de su boda. Dejó de comer. Su estómago se cerró.
                                     No se quejaba. Ya no se rebelaba contra una boda que era ya un hecho. Sin embargo, era más que evidente que Samantha no quería casarse con un hombre al que no conocía. Gabriel seguía siendo, aún después de muerto, el dueño de su corazón. No quería abandonar la isla en la que prácticamente había crecido. Pero el mundo se empeñaba en tomar decisiones por ella.
                                   Samantha se pasaba las horas muertas encerrada en su habitación. No mostró ilusión alguna cuando la modista vino a verla para mostrarle su vestido de novia.
                                   Maude se dio cuenta de que su hermana ni siquiera lloraba.
                                   La abrazaba.
-He escuchado a padre decir que mister Halliwell es un buen hombre-le dijo en una ocasión-Vas a ser muy feliz con él.
-Lo sé-dijo Samantha en voz muy baja.
-Por lo menos, dale una oportunidad. No te consumas. Te estás haciendo daño.
                                    Samantha sabía que su hermana tenía razón.
-No diré que no quiero casarme porque no lo vas a entender-se sinceró.
-Te conozco bien-admitió Maude, suspirando con cansancio-No quieres casarte con ese hombre. Pero no te queda otra opción.
                                 Samantha no lloró cuando supo que su futuro marido acababa de arribar a la isla. Se había hospedado en la pequeña posada que había allí.
                                  Las lágrimas se le habían secado.
                                Sólo quedaba esperar. Mister Halliwell acudió a verla a la tarde siguiente. Le pareció un hombre de aspecto agradable. Pero era, al menos, veinte años mayor que ella. Gabriel también había sido mucho mayor que ella.
                                Entonces, no le había parecido un defecto muy importante. Ahora, la diferencia de edad la asustaba.
                               Mister Halliwell se mostró amable con ella.
-Celebro mucho poder conocerla, miss Samantha-le confesó-Tenía muchas ganas de verle la cara. Después de todo, nos vamos a casar.
-Encantada de conocerle, mister Halliwell-dijo Samantha.
-Amos...Me llamo Amos Halliwell. Puedes tutearme. Yo te tutearé.
-Amos...
                               Él besó la mano de Samantha.
                               Parecía un buen hombre.



-Entiendo que esté nerviosa-observó mister Halliwell.
-¿Por qué voy a estar nerviosa?-mintió Samantha.
-Es la primera vez que nos vemos. Sólo la he escrito unas cuantas veces. ¡Y me voy a casar con usted!
-Está bien, mister Halliwell. Amos...No pasa nada.

lunes, 7 de septiembre de 2015

UNA FOTO

Hola a todos.
Aquí os traigo una foto que he encontrado mientras navegaba por Internet.
Pertenece a una casa que se construyó en la década de 1960.
Espero que sea de vuestro agrado.

sábado, 5 de septiembre de 2015

LA CHICA DE LOS OJOS GRISES

Hola a todos.
¡No os preocupéis! Ya me quedan menos añadidos a esta historia. Desde luego, este blog se ha convertido en el blog de mi querida Stella, je, je.
Aquí os traigo un nuevo añadido a mi "fanfic" La chica de los ojos grises. 
¡Vamos a ver qué ocurre!

-Hace mucho tiempo que no salimos a pasear-comentó Stella.
                             Estaba contenta por haber salido a dar un paseo aquella tarde con Samantha.
                             Era verdad que las vidas de ambas habían cambiado. Stella apenas llevaba unos pocos meses casada con Edmund. Pronto, mister Halliwell llegaría a Quibble.
                             Samantha no quería hablar de su futuro marido. Un hombre con el que sólo se había escrito unas pocas veces. Ni siquiera había hablado personalmente con él. Mister Halliwell no es Gabriel, pensó con tristeza.
-Tienes que ser la señora de tu casa-le recordó Samantha.
                            De pronto, Stella se había convertido en lady Stella Templewood. Tenía que cumplir con sus obligaciones. Edmund seguía al frente de la Templewood & Ransom Company.
-Los negocios van a las mil maravillas-le contó Stella a Samantha.
-Háblame de ellos-le pidió la joven.
-Arthur Ransom habla de expandir el negocio. Ya no quiere limitarse sólo al Estado de Assam. Habla de ir más lejos. Siempre me llamó la atención que no existieran oficinas de la compañía en Calcuta. Eso va a cambiar. Arthur quiere abrir una oficina en Calcuta.
-¿Os vais a ir a vivir allí?
                              Stella se encogió de hombros. De momento, Edmund no quería ni oír hablar de la posibilidad de irse a vivir a Calcuta. Enviaba barcos cargados con toda clase de especies a Europa. Estaba ganando mucho dinero. Edmund estaba siendo un digno sucesor de su padre.
                               Sólo sabía Stella que no quería alejarse de Edmund. ¡Pero Calcuta estaba tan lejos!
                               Sin embargo, antes o después, acabaría separándose de Samantha. La joven sabía que su marido quería irse a vivir a Inglaterra tras la boda. ¡Debía de abandonar Quibble!
                               Miles de ideas pasaron por la mente de la joven.
-¿Te irías a vivir a Inglaterra?-le preguntó Samantha-Edmund es de allí. Como tú...
                               Stella volvió a encogerse de hombros.
-No lo sé-respondió con sinceridad.
                               Llevaba muchísimo tiempo viviendo en aquella isla. No se veía así misma viajando a Inglaterra.
                               Quería quedarse a vivir allí. Si tenía un hijo, debía de crecer en Quibble.
                               Samantha se dio cuenta de que estaba temblando. Y se percató de lo pálida que se había puesto Stella. Las cosas estaban cambiando a una velocidad endiablada. Las dos estaban muy asustadas. Pero Stella contaba con el amor y con el apoyo de Edmund.
                              En la cama...
                              Edmund la besaba muchas veces con amor y con pasión al mismo tiempo. Besaba su cuello una y otra vez saboreando la textura de su piel. Besaba uno de sus hombros. Mordisqueaba el lóbulo de su oreja. Incluso, besaba uno de sus pechos. Se atrevía a lamer sus pezones.
                               La acariciaba con las manos. La abrazaba con fuerza.
                               Edmund deseaba a Stella. Y, al mismo tiempo, la amaba.
                               Samantha frunció el ceño. Ella no podía ponerse en el lugar de Stella.



                                Las cosas irán bien, pensó la joven.
                                Decidió que sería una buena esposa para mister Halliwell. Intentaría olvidar a Gabriel. Trataría de ser feliz al lado de aquel hombre al que todavía no había visto en persona. Y no se iría nunca de Quibble.

viernes, 4 de septiembre de 2015

"GOD SAVE THE QUEEN"

Hola a todos.
Hoy, me gustaría subir a este blog una canción. Es una buena manera de finalizar la semana. Y de empezar el fin de semana. ¿Qué os parece?
Empezamos este lunes con música punk de los 70.
Es un tema muy movido. Muy breve...Pero directo al grano.
En esta ocasión, os traigo el gran éxito de los Sex Pistols, para muchos, el grupo de punk británico por excelencia, God save the Queen. 
Controvertido y, al mismo tiempo, genial, Sid Vicious en el corazón.


miércoles, 2 de septiembre de 2015

AÑADIDO A "LA CHICA DE LOS OJOS GRISES"

Hola a todos.
Aquí os traigo un nuevo añadido a mi "fanfic" La chica de los ojos grises. 
Es un extracto de lo que podría ser el diario de Maude.
¡Veamos qué es lo que le pasa por la cabeza!

                                     No quería ver que Edmund no estaba enamorado de mí, a pesar de que él me lo demostraba con sus gestos. Con sus gestos de amor hacia Stella...
                                   No puedo interponerme entre ellos. 
                                   Sólo siente por mí un profundo cariño. Su corazón le pertenece a Stella. Su cuerpo le pertenece a ella. No es mío. 
                                  No puedo acercarme a él, aunque esté casado, porque se trata de una guerra que he perdido. Ni siquiera he llegado a pelear la primera batalla. 
                                Edmund sólo me ha besado en la frente. Ha sido a Stella a quién ha besado con pasión en los labios. 
                                 Sólo le brinda sus besos a Stella. Sólo ella recibe las caricias que le prodiga en su piel con las manos y con los labios. Sólo a ella besa con arrebato en el cuello. 
                                Y yo he de tragarme las lágrimas para no seguir sufriendo. ¡Pero estoy sufriendo mucho! 



                                   Discuto con Samantha. 
                                   No logra superar la muerte de Gabriel. 
                                  Me veo a mí misma reflejada en ella. ¿Acaso puedo yo superar el desamor de Edmund? 
                                 Me quiero morir. Pero he de seguir viviendo. 
                                 El mundo no se acaba con Edmund. El mundo sigue adelante.